Una terrible sustancia, el monóxido de dihidrógeno. Por ejemplo, su inhalación puede ser fácilmente mortal. Además, es un componente importante de la lluvia ácida y se encuentra en tumores concerígenos. Es más, incluso después de lavar la comida, la contaminación por MODH sigue presente.
Por tanto, no es de extrañar que la ciudad californiana de Aliso Viejo estuvo a punto de prohibir ciertos vasos desechables citando entre otras razones que en su fabricación se empleaba esa sustancia tan terrible para la salud humana.
Pero no todo es malo. Hay quien defiende el hidróxido de hidrógeno (un nombre por lo visto más amable y científicamente correcto que MODH) por sus grandes cualidades. Por ejemplo, se sabe que en dosis pequeñas es bueno para la salud.
(vía Techdirt)
[Estoy escuchando: «The Flower of Carnage» de Meiko Kaji en el disco Kill Bill Vol. 1]