Cómo visitar un museo de arte, de Johan Idema
En Cómo visitar un museo de arte, Johan Idema ofrece distintas claves y consejos muy útiles para disfrutar mucho más de tu próxima visita al museo. No te dejes intimidar por lo que parece un mundo solo para iniciados.
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Después del vídeo tienes la transcripción del contenido.
TRANSCRIPCIÓN
Cómo visitar un museo de arte, de Johan Idema y publicado por GGili. El subtítulo es claro: “Y convertir tu visita en una experiencia gratificante”. O como dice una estrella en la portada: “Deja de deambular y actúa”.
Te lo cuento.
El cubo blanco es uno de los inventos más odiosos de los museos. Como cuenta la introducción, la intención era “buena”. Crear un lugar puro, limpio, pulcro, un lugar sin contexto para que las obras de arte brillasen por sí solas. En silencio te enfrentas tú solo a la creación artística.
A la obra.
Pero los seres humanos precisamos contexto. Y si no lo tenemos, lo creamos. Así el cubo blanco adquiere sus connotaciones negativas: da miedo, resulta antiséptico, produce rechazo y frustración. Y las obras expuestas son las que acaban pagando. Y si no hay cubo blanco, tenemos el tono de templo, de lugar sagrado al que accedes vacilante —porque es evidente que no eres un iniciado.
Induce a la pasividad.
Pero con este libro, Johan Idema nos recuerda que visitar un museo de arte es un proceso, algo que hacemos, una interacción. El museo está para vivirlo.
El libro está escrito como una serie de consejos, directos y breves. Son ideas que quiere que pongas en práctica con la mayor facilidad posible. Son consejos que vienen de alguien que sabe de arte y de ir a museos.
Un ejemplo.
“El arte solo existe si se observa”. Podemos aprender mucho mirando cómo otros miran el arte. Podemos estudiar las reacciones de los demás.
Más propuestas.
Dejarnos escandalizar. Enfrentados a esa obra incomprensible, disfrutar de la conmoción momentánea, permitir que nos guíe.
Encontrar tu obra maestra. Podemos concentrarnos en unas pocas obras y dejar las demás de lado.
Si puedes, haz fotos. Es una forma de relacionarte con el arte. Puedes intentar fotografiar tu experiencia.
El restaurante y la tienda del museo son lugares muy importantes que hay que saber aprovechar. En la tienda, por ejemplo, suele haber análisis profundos.
Escucha música mientras haces la visita. Crea tu propia banda sonora para ese día en el museo.
Llevar a un niño o niña al museo. Aventajan con creces a los adultos. No vacilan en hacer preguntas, porque no sienten la necesidad de fingir que entienden. Si puedes, no pierdas la oportunidad de ver un museo a través de sus ojos.
Cómo visitar un museo de arte es un libro que está a favor del visitante. El tono es amable, los consejos claros y su intención última es darte herramientas para mejorar tu próxima visita. Es ideal para aquellos de nosotros que nos gusta visitar museos, sobre todo de arte contemporáneo, pero que no somos entendidos. Nos invita a dejar de lado nuestros recelos y disfrutar de todo lo que puede ofrecernos un museo. Y tal y como deja bien claro el libro, un museo nos ofrece mucho más que la posibilidad de mirar algunas obras.
Sobre eso de visitar museo, ¿tienes alguna recomendación? Deja tus comentarios. Y si te interesa ver más vídeos sobre mis lecturas, ya sabes: suscríbete.
Hasta la próxima.