El autor y la editorial me resultan desconocidos, pero es siempre agradable comprobar que el deseo de publicar ciencia ficción no disminuye.
El Señor de Constantine es una trilogía del autor escocés Robert Barrier, de la que se presenta como novedad editorial la primera parte, La Llegada del Senescal. La acción transcurre en un lejano planeta llamado Promisión, que fue primero terraformado y más tarde colonizado por una nave que llevaba a bordo un contingente de colonos británicos de procedencia mayoritariamente escocesa. La destrucción de la nave y una guerra fraticida hacen que la colonia retroceda culturalmente hasta una época equivalente a los inicios de la revolución industrial y quede olvidada del resto de la civilización universal. La «panhumanidad» redescubre el planeta muchos años más tarde y envía a un agente, Tomás de Constantine, para que determine si la civilización de Promisión está madura para integrarse de nuevo en la corriente cultural galáctica. El agente queda atrapado en la magia particular del planeta, en el que prospera una original forma social completamente diferente a la panhumana. Tomás tendrá que enfrentarse a sus propias contradicciones y a una conjura galáctica para que una corporación panhumana alcance unas cotas de dominación y poder que alterarían el delicado equilibrio entre las distintas fuerzas que configuran la cultura universal: el estado por una parte, las corporaciones por otra y los propios panhumanos, constituidos por humanos biológicos, ¡As y «cetas».