Peepshow #1 de Joe Matt

Joe Matt es un dibujante de tebeos. Su vida transcurre entre recurrentes fantasía sexuales que llevan a la masturbación, una relación de desprecio y dependencia con su novia, búsquedas cada vez más absurdas de formar de escaquearse del trabajo y el coleccionismo de carretes de view-master.

Su novia, Trish, está sinceramente enamorada, pero para Joe es poco más que un cuerpo bonito que le ofrece seguridad y a la que sólo puede aceptar en sus propios términos. Las peleas son continuas, todas producidas por el egoísmo sin medida de Joe que le lleva a rechazar cualquier posibilidad de hacer algo nuevo. Para él sólo existen las otras, a poder ser exóticas, con las que fantasea y sueña continuamente. En particularmente, una muchacha joven que trabaja con Trish. Su amigo, Seth, un ser humano aparentemente integrado, es el único capaz de decirle las verdades a la cara sin sufrir las consecuencias. Cuando Trish expresa su parecer, es probable que acabe sufriendo abusos verbales.

Joe Matt es también el autor de Peepshow, el cómic del que estoy hablando y cuyo protagonista es Joe Matt. La línea que separa a Joe el personaje de Joe el autor se diluye continuamente, incluso algunas situaciones del cómic arrancan cuando Trish descubre páginas ocultas del propio cómic que estamos leyendo, y el protagonista queda retratado como un cabrón perdedor incapaz totalmente de tener en cuenta los sentimientos de los demás, objeto de burla y risa por parte del resto de los personajes y de los lectores, y siempre en el punto de mira del sarcasmo del autor, que es Joe Matt.

¿Quién es Joe Matt?

Peepshow es un cómic con grandes dosis de humor, pero sólo se ríe de Joe Matt. Las situaciones cómicas arrancan siempre de la incapacidad de Joe Matt para enfrentarse a un mundo de adultos, comportándose, al menos en este primer volumen, como un niño hiperdesarrollado. Al resto de los personajes, no importa lo bajo que hayan caído, se les trata con consideración y ternura.

Evidentemente, el protagonista del cómic no es su autor. Nadie puede ser así y luego tener la lucidez suficiente para retratarse de tal forma en su cómic. Estamos quizá no tanto ante un cómic autobiográfico como una especie de confesión o retrato grotesco. El autor, incapaz quizá de hacerle mal a otros, no duda en dibujarse bajo la peor luz posible para convertirnos a los lectores en mirones voluntariosos. Quizá la miseria de Joe Matt esté en ser incapaz de comportarse de otra forma. Quizá la nuestra esté en no poder dejar de mirar. Quizá nos reímos porque nos reconocemos en el observador o en el observado.

Con diligencia y fascinación asistimos a los momentos más íntimos de Joe Matt el personaje, y obedientemente nos reímos de él. Pero, ¿de quién nos reímos en realidad?

Peepshow es una de esas obras, y van…, que demuestra la madurez narrativa y expresiva del cómic. La forma está lo suficientemente madura como para manejar temas que parecían reservados a la literatura.

Publicado originalmente en El archivo de Nessus.

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